Cayó 0-1 ante Atlético Empalme y terminó el partido con 9 jugadores.
Era para un empate, pero en una jugada desafortunada, la visita se encontró con un penal a favor que transformó en gol.
Si bien no hubo grandes llegadas con peligro hacia los arcos, durante gran parte del encuentro se fueron intercambio el dominio ambos equipos. Comenzaron mejor los locales donde apretó al visitante sobre su area, llevando aproximaciones, pero no jugadas reales de peligro.
Lo mismo se dio al revés cuando pasados los primeros 15 minutos de juego, la visita comenzó a controlar más la pelota, aunque sin mucha profundidad.
En el segundo tiempo, el dominio fue un poco más notorio de Atlético, momento en que Juventud Unida pareció empezar a sentir más el cansancio que su rival. Así fué que a los 28 de esa etapa un rebote habilita al mejor jugador de la visita, Enzo Branto, quien encara mano a mano contra el arquero Brian Acosta, que en su desesperación por llegar antes a la pelota, choca con el delantero, y el árbitro cobra penal y expulsión por último hombre. En su lugar entró Kevin Olivares, que si bien adivinó el palo del remate, el tiro fué bien ejecutado por Matías Valle, transformando el 1 a 0 que luego sería el resultado definitivo.
El gol en contra hizo reaccionar a los locales, que con un hombre menos fueron a buscar el empate, forzando el retroceso visitante, y con más corazón que fútbol, arrinconaron a su rival, aunque prácticamente sin generar situaciones claras de gol, salvo un buen remate desde afuera del área de Enzo Gazzaniga que pasó muy cerquita del travesaño.
Ya cuando faltaban 3 minutos para finalizar el encuentro, a la salida de un tiro libre para Caju, cae un jugador de Empalme en el área, prácticamente nadie en la cancha vió que pasó, pero el árbitro, aparentemente sí, y por eso lo expulsó a Facundo Rodriguez, el supuesto agresor del jugador visitante.
Como consecuencia del hecho se produjo una pequeña escaramuza entre los jugadores, entró la policía al campo de juego, algún que otro empujón, insultos, pero la cuestión, por suerte, no pasó a mayores.
La derrota por supuesto que deja bronca, ansiedad, pero también deja claro que el equipo puede generar juego asociado, que es un acierto el de Gazzaniga como volante central, desparramando fútbol para todos sus costados, y Juan Araujo como criterioso y efectivo enganche. También el descubrimiento de Ezequiel Tevez como lateral izquierdo, quien le da una buena salida y juego por ese lateral al equipo.
Por supuesto que Caju tiene cosas que corregir y mejorar, pero una de las cosas más difíciles que tiene el fútbol, que es armar juego asociado y llegar así al área rival, ya lo tiene. Los otros aspectos del juego son más perfeccionables en menos tiempo, y en ese camino seguramente el entrenador Adrián Cambiasso orientará los mayores esfuerzos.